Libérate de la carga mental en la maternidad en 3 pasos
Ansiedad, cansancio extremo, ganas de llorar, emociones a flor de piel, momentos de enfado y rabia injustificados, ganas de salir corriendo, cansancio físico… La carga mental en la maternidad se puede manifestar de muchas maneras.
Estos síntomas son un aviso de que estás soportando un nivel de estrés, de manera prolongada e intensa, que biológicamente no estás preparada para gestionar. Y esto tiene mucho que ver con cargar con más responsabilidades de las que deberías.
¿Necesitas pedir ayuda de vez en cuando?
¿Deberías delegar más en tu pareja?
¿Sabes comunicar de manera asertiva lo que necesitas?
¿Te paras a sentir lo que sea que estés sintiendo?
Tranquila, voy a darte algunas pautas que te ayudarán a no llegar a esos extremos tan difíciles de gestionar
1. Para, respira,siente
Cuando la máquina del cerebro va tan rápido que nos genera esas sensaciones de «no poder más», lo primero es pararla. Pon una mano en el pecho y la otra en tu abdomen y respira 5 veces profuuuundamente. Esto te ayudará a situarte en el presente y poder hacer lo siguiente que te propongo.
2. Descarga tu mente
Haz una lista de todas esas cosas que te están agobiando y agotando tanto, incluyendo loq ue estás sintiendo y lo que crees que necesitas. Escríbelas, ponles un nombre, y verás que automáticamente se hacen más pequeñas. Escribir tiene el poder de poner luz y ordenar todo lo que en nuestra cabeza parece enorme y amenazador.
3. Busca soluciones
Una vez te hayas desahogado, empieza a buscar soluciones. Habrá soluciones más fáciles que otras, cómodas e incómodas, pero te aseguro que salvo una sola cosa en la vida, todo tiene su solución. Así que ves una por uno, proponiendo una posible solución.Por ejemplo, si en tu día a día te sientes agotada porque tienes bajo tu responsabilidad todo lo referente a tu(s) hijo (s), quizás una solución puede ser hacer los ajustes necesarios en los horarios para tener un par de veces a la semana un rato para apuntarte a clases de yoga.
Y ¡RECUERDA! Si crees que no puedes gestionar lo que te está pasando sola, escríbeme sin compromiso